El pasado mes de julio, el Ayuntamiento de Valencia anunció la remodelación del jardín en el que se ubica el busto de Nino Bravo dentro del barrio de Morvedre, muy relacionado con el cantante al haber crecido y vivido en la zona. Según declaraciones del vicealcalde, «la idea es oficializar el nombre popular del jardín para que se denomine definitivamente jardín de Nino Bravo».
La semana pasada, medios valencianos como elPeriòdic se hacían eco de una nueva propuesta para que, aprovechando la remodelación, el mismo jardín se convierta en un espacio de recuerdo permanente a Nino Bravo y sus canciones. Específicamente se solicita sustituir el actual busto por una estatua de cuerpo completo del cantante, así como tematizar los diferentes rincones del parque para rememorar sus canciones más conocidas, ya sea a través del mobiliario, de la decoración o incluso de la tecnología, para que se puedan escuchar con códigos QR a través de teléfonos móviles.
Esta propuesta, liderada por Ciudadanos y su portavoz Fernando Giner, ha provocado un inusitado entusiasmo por parte de los fans de Nino Bravo, quien a través de su página oficial de Facebook han mostrado su apoyo al proyecto desde todos los rincones de España y Latinoamérica. Son más de 5.000 las personas que, lejos de ideologías, han secundado la noticia en esta red social.
Comentarios como «Se lo merece por dejar muy alto a su tierra, Valencia. Me siento orgullosa de que sea mi paisano» o «Nino Bravo era un gran cantante y un gran valenciano; paseaba sus canciones y su querida Valencia por todo el mundo. Se lo merece» son un ejemplo de la positiva respuesta recibida. Otros comentarios, por su parte, valoran la propuesta por encima de colores políticos: «Yo de Ciudadanos no quiero nada, pero haré una excepción. ¡Gran idea! Y ojalá sea una realidad a la mejor voz que jamás he escuchado«.
La trayectoria de Nino Bravo está estrechamente vinculada con su ciudad. Sus innumerables actuaciones en presentaciones falleras, el apadrinamiento de artistas de su tierra y su proyecto de creación de un estudio de grabación valenciano hablan de su compromiso con Valencia, ciudad a la que nunca renunció pese a las ofertas que recibía para radicarse en Madrid. Sus fans esperan que, a 50 años de su muerte, este compromiso sea valorando para que la figura de Nino Bravo cuente con un espacio dedicado a su obra y memoria en el barrio que le vio crecer.